A
continuación presentamos las complicaciones específicas para los procedimientos
más comúnmente realizados:
Balón
intragástrico
●
Perforación gástrica o esofágica
La
colocación del balón intragástrico se hace mediante endoscopía, introduciendo
el balón desinflado a través de la boca. En muy raras ocasiones, la
manipulación con el endoscopio puede perforar el esófago o el estómago. Estas
dos situaciones son potencialmente fatales, y la mayoría de las veces requieren
de una cirugía urgente para identificar y reparar la perforación.
●
Ruptura del balón
Los
balones están fabricados con plásticos muy resistentes, pero en algunas raras
ocasiones el balón puede romperse al momento de su introducción o durante su
permanencia en el estómago. Aunque esta complicación no pone en riesgo la vida
del paciente, es necesario retirar el balón por medio de un nuevo procedimiento
endoscópico.
●
Erosión gástrica
A
fin de cuentas, el balón constituye un cuerpo extraño dentro del etómago. Como
todos los cuerpos extraños, conforme pasa el tiempo el balón puede inflamar y
erosionar la pared del estómago, perforándolo. Por esta razón, todos los
balones deben retirarse en un plazo máximo de 6 meses. Si después de este
tiempo aún no se ha perdido el peso planeado, puede colocarse un segundo balón
2 meses después de la extracción del primero. La extracción del balón también
se realiza por vía endoscópica.
●
Recuperación del peso perdido
Como
el balón debe retirarse después de 6 meses, se pierde el fenómeno de
restricción y la sensación de saciedad. Los pacientes pueden alimentarse
nuevamente como lo hacían antes de la colocación del balón, por lo que la
mayoría de los pacientes recupieran mucho del peso perdido, por lo que es
fundamental adoptar buenos hábitos alimenticios y hacer del ejercicio una
costumbre. Por esta razón, muchos pacientes prefieren otro tipo de
procedimientos en los cuales los efectos son más duraderos y con un menor riesgo
de recuperar el peso perdido.
Banda
gástrica ajustable
●
Ajustes periódicos
La
banda requiere de ajustes periódicos para lograr una restricción óptima. Si la
banda está demasiado ajustada, los pacientes no pueden comer y presentan dolor,
vómito e incluso reflujo; si la banda está demasiado floja, se pierde el
fenómeno de restricción, acompañándose de la sensación de hambre y una pérdida
de peso insuficiente o nula. Los ajustes siempre deben de llevarse a cabo por
especialistas que tengan experiencia en el manejo de la banda gástrica
ajustable.
●
Deslizamiento de la banda y prolapso
gástrico
En
ocasiones la banda se desliza sobre el estómago, alojándose en el esófago o en
una parte mas baja del estómago. Si sube hacia el esófago, el paciente no puede
ingerir alimentos; si baja hacia el estómago, aumenta el tamaño del reservorio
y se pierde el fenómeno de restricción. Cualquiera de estas dos situaciones
requieren de una nueva cirugía para retirar o recolocar la banda.
●
Erosión intragástrica
Cuando
las bandas están demasiado ajustadas, ejercen una gran presión sobre el
estómago. Esta presión produce inflamación de la pared gástrica, y puede llegar
incluso a erosionar la pared del estómago. Esta es una complicación tardía muy
seria, poniendo en riesgo la vida del paciente. En estos casos es necesario una
nueva cirugía para retirar la banda, y el paciente debe manejarse como una
perforación gástrica.
●
Dilatación esofágica
En
algunos pacientes, sobretodo aquellos que no llevan una buena alimentación y un
control adecuado de la banda, puede presentarse la dilatación del esófago. El
esófago es un tubo muscular que lleva el alimento al estómago; si la banda está
demasiado ajustada y el paciente ingiere grandes cantidades de alimento, el
esófago trata constantemente de empujar ese alimento a través de la banda
demasiado ajustada, provocando una dilatación del esófago. Esta complicación
tardía puede producir muchos síntomas, entre los que destacan dolor,reflujo
importante, náusea y vómito. Esta complicación requiere el retiro de la banda.
●
Problemas relacionados con el puerto
subcutáneo
El
puerto subcutáneo es el dispositivo a través del cual se realizan los ajustes
de la banda. En ocasiones el puerto se desprende de la pared abdominal,
imposibilitando el acceso al mismo para realizar los ajustes. Otra complicación
es el desprendimiento del tubo que conecta el puerto a la banda. Estas dos
complicaciones pueden corregirse fácilmente, aunque requieren de una nueva
cirugía. La complicación más seria del puerto subcutáneo es la infección del
mismo, y casi siempre se relaciona con una erosión gástrica. Si se descarta la
erosión, el puerto puede retirarse para eliminar el sitio de la infección; una
vez eliminada la infección, puede colocarse un nuevo puerto para continuar con
el tratamiento de la obesidad.
Gastroplastía
vertical con banda
●
Recanalización gástrica
Este
procedimiento requiere la colocación de una línea de grapas vertical en la
parte más alta del mismo, creando así un pequeño reservorio gástrico. Con el
paso del tiempo, esta línea de grapas puede deshacerse, sobretodo en aquellos
casos en que el estómago no se secciona, permitiendo el paso del alimento
directamente al resto del estómago. Esta recanalización del estómago provoca la
pérdida del fenómeno de restricción, por lo que los pacientes dejan de perder
peso e incluso pueden recuperar el peso perdido. Esta complicación tardía
requiere de una nueva cirugía para remodelar el reservorio, o para convertir el
procedimiento a uno con menos complicaciones y mejor pérdida de peso a largo
plazo.
●
Perforación gástrica
La
perforación del estómago puede presentarse durante la cirugía, o después de la
misma como una complicación relacionada a la banda gástrica. Algunos cirujanos
utilizaban bandas de materiales como el polipropileno, los cuales pueden
erosionar al estómago. La mayoría de estos casos requieren una cirugía urgente
para identificar y controlar la perforación gástrica.
●
Dilatación esofágica
De
manera similar a lo que sucede con la banda gástrica ajustable, el esófago
puede dilatarse en los pacientes con gastroplastía vertical con banda como una
respuesta a una alimentación excesiva. La banda empleada en este procedimiento
no tiene la capacidad de ajustarse, por lo que siempre mantiene la misma
compresión sobre el estómago, y limita la velocidad de vaciamiento del
reservorio. Si la cantidad de alimento ingerido es excesiva, el esófago
intentará movilizar ese alimento encontrando mucha resistencia, produciendo una
dilatación progresiva que eventualmente puede provocar síntomas como dolor,
reflujo, náuseas y vómito. El tratamiento de esta complicación es revertir el
procedimiento, retirando la banda y permitiendo el paso normal del alimento a
través del estómago.
●
Recuperación del peso perdido
Muchos
de los pacientes en los que se les ha realizado este procedimiento recuperan
gran parte del peso perdido, generalmente como consecuencia de la
recanalización del estómago. Por esta razón, además del resto de las
complicaciones ya descritas, la gastroplastía vertical con banda prácticamente
ha sido abandonada por la mayoría de los cirujanos bariátras, y ha sido
reemplazada por nuevos procedimientos que logran mejores resultados con una
menor tasa de complicaciones.
Gastroplastía
vertical en manga
●
Fugas y dehiscencias
Siempre
que se secciona alguna parte del estómago o del intestino existe el riesgo de
que el borde de la resección se abra parcial o totalmente, favoreciendo la fuga
del material gástrico o intestinal hacia la cavidad abdominal. Esto sucede
también con la gastrectomía vertical en manga, y generalmente requiere de una
cirugía urgente para identificar y controlar la fuga. Un aspecto técnico de
este procedimiento que reduce relativamente el riesgo de presentar esta
complicación es la de reforzar la línea de grapas con una sutura continua,
invaginando la línea de grapas. El riesgo de presentar fugas y sangrado
disminuye cuando se refuerza la línea de grapas con suturas, aunque el riesgo
de presentar esta complicación nunca logra eliminarse por completo.
● Dilatación gástrica
El
estómago tiene la capacidad de distenderse para acomodar el alimento que se
ingiera. Aunque en esta cirugía se extirpa la mayor parte del estómago, la
porción restante mantiene la capacidad de distenderse. Si la cantidad de
alimento que se ingiere es excesiva, el estómago se dilatará progresivamente,
eliminando así el fenómeno de restricción e interfiriendo con la pérdida de
peso. Esta complicación tardía requiere de una nueva cirugía para remodelar el
reservorio gástrico, reduciendo nuevamente la capacidad del estómago para
producir nuevamente el fenómeno de restricción.
●
Obstrucción del vaciamiento gástrico
El
vaciamiento del estómago puede bloquearse si el diámetro interno del reservorio
gástrico es muy estrecho, produciendo la obstrucción del estómago. Esta
complicación es extremadamente rara, y generalmente se manifiesta como
incapacidad para pasar los alimentos, vómito y dolor. Estos pacientes requieren
una evaluación radiológica y endoscópica del reservorio, para identificar el
grado de la obstrucción y el sitio de la misma. Aunque muchas veces la
obstrucción puede tratarse realizando dilataciones endoscópicas, en ocasiones
es necesaria una nueva cirugía para convertir el procedimiento en una
derivación gástrica, reinstalando así el tránsito intestinal.
Bypass
gástrico en "Y"de Roux
●
Fugas y dehiscencias
Como
ya se ha mencionado antes, la resección de cualquier porción del tubo digestivo
conlleva el riesgo de presentar alguna fuga o dehiscencia en cualquiera de los bordes
de dicha resección. En el caso del bypass gástrico, el riesgo aumenta de manera
considerable, ya que el número de segmentos que se seccionan es mayor: la
sección del estómago para formar el reservorio gástrico forma dos posibles
sitios de fuga (una en el reservorio y otra en el remanente gástrico), mientras
que la sección intestinal requiere de una primera conexión o anastomosis entre
el estómago y el intestino, y una segunda anastomosis entre el intestino que
forma el asa alimentaria y el que forma el asa biliopancreática. Aunque algunos
pacientes con esta grave complicación pueden manejarse de manera conservadora,
muchos requieren de una cirugía urgente para identificar y controlar esta
complicación potencialmente fatal.
●
Úlceras gástricas
Como
consecuencia de la remodelación anatómica del bypass gástrico, el remanente
gástrico se vuelve más propenso a la formación de úlceras. Las úlceras en el
remanente pueden producir sangrado e incluso la perforación del estómago, y si
cicatrizan pueden obstruir la salida del estómago al reducir el diámetro de la
conexión entre el estómago y el intestino. Por esta razón los pacientes
sometidos a este tipo de procedimientos deben eliminar todos los factores que
favorezcan la aparición de úlceras. Uno de los factores más importantes en el
desarrollo de esta patología y que debe de eliminarse forzosamente es el
tabaquismo.
●
Fístula gastro-gástrica
El
término "fistula" se refiere a la comunicación anormal entre dos
estructuras. Los pacientes con bypass gástrico pueden complicarse con una
fístula entre el reservorio gástrico y el estómago remanente, en ocasiones como
consecuencia de alguna úlcera o de alguna fuga preexistentes. Esta
recanalización del estómago elimina el fenómeno restrictivo, por lo que los
pacientes dejan de perder peso y empiezan a recuperar el peso perdido. Además,
muchos de estos pacientes pueden presentar úlceras en el reservorio por la
exposición a los jugos gástricos producidos en el remanente. El tratamiento
para esta complicación tardía es la remodelación quirúrgica del reservorio
gástrico, generalmente con la resección de alguna parte del estómago remanente.
●
Estenosis de la anastomosis
La
conexión que se forma entre dos estructuras se llama "anastomosis".
En el caso del bypass gástrico, la anastomosis entre el estómago y el intestino
debe de ser lo suficientemente amplia para permitir el libre paso del alimento
del reservorio gástrico hacia el intestino, pero lo suficientemente estrecha
para reducir la velocidad a la que se vacía el reservorio, prolongando la
sensación de saciedad. Esta anastomosis puede estrecharse de manera
significativa a consecuencia de la cicatrización de los tejidos, produciendo
una "estenosis" que impide el paso del alimento. Esta complicación
tardía puede corregirse realizando dilataciones endoscópicas, aunque en algunos
casos es necesaria una nueva cirugía para remodelar la anastomosis.
●
Formación de hernias internas
Se
le llama "hernia" al paso de un órgano o estructura a través de algún
defecto o espacio anormal en otro tejido. La remodelación intestinal inherente
al bypass gástrico crea algunos espacios o defectos a través de los cuales
puede introducirse algún asa intestinal. Esta complicación se conoce como
"hernia interna", y puede llegar a causar una obstrucción intestinal.
Los pacientes con obstrucción intestinal presentan dolor y distensión
abdominal, acompañado de náuseas, vómito, e incapacidad para canalizar gases.
Debido a que existe el riesgo de estrangulación en la porción de intestino
involucrada, estos pacientes deben de reintervenirse de manera temprana.
Durante la cirugía se identificará el sitio de la hernia para regresar el
intestino a su posición habitual, y posteriormente se cerrarán los espacios
para disminuir el riesgo de una nueva hernia interna.
No hay comentarios:
Publicar un comentario